11 junio 2008

Seminario Itinerante PROhumana en Canadá: ¡Rescatar lo mejor de nuestra experiencia!

Por: José Miguel del Solar, Gerente Recursos Humanos, Cristalerías Chile.

Montreal, Ottawa y Toronto fueron las ciudades, paisajes, personas y culturas que conocimos, en este 2º Seminario Itinerante de RSE, organizado por PROhumana. Pero lo importante es qué hacer en nuestro regreso, ¿Qué nos sorprendió, qué rescatamos, qué utilidad dar a lo aprendido?, estas son muchas de las interrogantes que dejan nuestra experiencia y el desafío a responder e implementar.

Fue una grata experiencia viajar con un grupo muy entusiasta de chilenos, de diversas empresas, áreas de actividad e historias personales. Todos íbamos en búsqueda de nuevas ideas y prácticas, pero sobretodo de una mirada más humana para poder aportar al país.

Quedamos gratamente sorprendidos con Canadá y su modelo de sociedad; una realidad cultural basada en la tolerancia, el respeto, la diversidad, los derechos de las personas, y al mismo tiempo, las inversiones y el crecimiento e impactados del crecimiento al servicio del desarrollo humano.

Visitamos muchas compañías de distintos rubros, ubicadas en altos y modernos edificios. Todo funcionó sin aspavientos ni complicaciones. Quizás algunos dirían que los canadienses se caracterizan por una fría cordialidad, pero es el reflejo de una actitud de excelencia en el quehacer de sus organizaciones.


La RSE parte fundamental del ADN canadiense

Canadá un país rico y desarrollado; no se ven las duras realidades de pobreza y delincuencia de los países sudamericanos, lo que permite focalizarse mejor en una misión de país de más largo aliento y donde las personas tienen un rol protagónico.

Vimos una realidad que se ha ido construyendo desde los colegios, universidades y comunidades en general. La preocupación por el otro, a través de una verdadera cultura de voluntariado se replica notablemente en las organizaciones.

Las empresas no sólo tienen principios, valores y misiones, sino que algunas hasta poseen sus propios credos, que son un referente de comportamiento e ideales para ser buenos empleados, ciudadanos y mejores personas.

La flexibilidad en el trabajo, seguridad social, legislación y conflictos laborales que en Chile tanto nos divide y nos distrae, son para ellos motivo de satisfacción por su cumplimiento y porque les permite una mejor calidad de vida.

El funcionamiento de las empresas está basado en la ética, las personas, la capacitación, la excelencia en el trabajo y en el entusiasmo de sus equipos. El tema de la transparencia en el actuar, la confianza en la gente, una desarrollada preocupación por el medio ambiente y las conductas sustentables son características propias de este país.

En su orientación hacia la comunidad, poseen una desarrollada cultura de beneficencia y caridad organizada muy eficientemente.

Respecto al medio ambiente, nos encontramos con claras políticas destinadas a la reducción del consumo de material contaminante, uso eficiente de energías y una gran conciencia antes de iniciar algún proyecto que pudiera afectar a la comunidad.

Todo lo expuesto anteriormente es posible con el compromiso de los empleados, normas regulatorias adecuadas y con un fuerte liderazgo desde la alta dirección. Así, las empresas entregan un mejor ambiente a su personal, fidel izar sus clientes y elevar su reputación al interior de la comunidad.

Nos quedamos con la esperanza, que este proyecto de Responsabilidad Social es posible, es exitoso, pero que requiere de un cambio de mentalidad en nuestro país. Tenemos que abrir la mente, los ojos y el corazón a esta realidad que nuestra sociedad necesita.

El presente desafío es rescatar lo mejor de nuestra experiencia, y así ponerla al servicio de su empresa y la comunidad. Para tal, es necesario la generación de alianzas, construcción de redes, compartir las buenas prácticas, impulsar nuevos proyectos y lo más importante, mostrar resultados.

No sigamos soñando con una mejor sociedad, ¡trabajemos para tenerla!